Pues sonará algo raro pero estaba muy buena , muy refrescante para el calor y al que le guste el picante puede jugar con el curry amarillo según la proporción , nosotros aconsejamos una ligera cucharada , lo justo para tener el punto pero sin romper el equilibrio del plato.
En realidad lo hemos llamada sopa como lo podíamos haber llamado crema , considero mejor esta última opción ya que en la elaboración no hemos utilizado caldo. Pero es un plato , que en su elaboración permite múltiples opciones : desde , simplemente , triturar el melón y servirlo frío o bien añadirle caldo , nata , leche de coco ,etc y formar la crema o sopa.
Ingredientes para 2 personas:
2 melones pequeños maduros tipo galia 100ml de nata
1 cucharada de curry amarillo tailandés 200ml de leche de coco
1 puñado de hojas de albahaca fresca
En primer lugar , partimos el melón en rodajas , limpiamos las pepitas , sacamos la piel y lo troceamos en partes pequeñas para pasarlo por la batidora. Luego se puede pasar por el chino para eliminar la existencia de partes más fribrosas pero a mi no me acaba de convencer , me gusta la textura del melón sin pulir. También , si vamos jugando con la batidora , podemos añadir un poco de aire y crear un poco de espuma en la parte superior jugando así con dos tipos de textura.
En un bol grande , añadimos la nata en la crema de melón , removemos bien , y ponemos las hojas de albahaca sin picar por encima. Guardamos en la nevera un buen rato para que quede bien frío y la albahaca haga su trabajo.
A la hora de ir a servirlo , preparamos el curry amarillo mezclando la pasta de curry con 200ml de leche de coco , removemos bien y llevamos un momento al fuego hasta que empiece a hervir.
Para servir , en un pequeño bol o plato sopero , colocamos un par de cucharadas de la crema , una punta de cuchara de curry amarillo y un poco de la albahaca picada fina.
Si lo acompañamos con unas gambas , estará de lujo pero ese es otro plato y otra idea.